lunes, 14 de julio de 2008

Ilusión óptica

Entre en un camino que creí iluminado -vaya ilusión óptica-, y continué dando pasos a la nada, buscando un lugar del cual no tenía mayores datos. Pero seguí hacía adelante como siempre, empeñada en llegar a donde quiero, empeñada en hacer lo que me venga en gana.

No había notado cuan necios eran mis intentos de llegar hasta el final, hasta las últimas instancias. ¡Que ganas tenía de lograrlo! y cuando estuve más cerca de la meta, caí y rodé. Tropecé como nunca antes lo había hecho, de la manera más tonta, por culpa del desespero; y observé como todo se alejaba de mi.

Extendí mis manos lo más que pude para tratar de alcanzar mi objetivo, use las palabras para ver si regresaba, incluso lancé una cuerda como último recurso a ver si aún podía volver a través de ella. Todo fue en vano, nada funcionó.

Entonces decliné en mis intentos, sólo de vez en cuando procuraba acercarme a aquel lugar, para mirar de reojo si todavía existía alguna oportunidad. Y si, a veces llegaba hasta medio camino, otras tantas me devolvía apenas entraba, el temor no me permitía continuar, y la última vez estuve arañando la línea de llegada. Tan cerca y tan lejos a la vez.

En la vía conseguí aliados, consejeros, compañeros y también contrincantes y detractores. Todos me ayudaron a notar la verdad. Me hicieron ver que el camino no tenía luz, que era un túnel sin salida del que podía escapar sólo si así yo misma lo quería.

No obedecí a ninguno, mis "aliados" terminaron siendo quienes me dieron el consejo de quedarme en el lugar, de seguir intentando hasta que se acabaran las opciones. Consejos... Aún no se si eran bueno o malos.

Al permanecer en el sitio me convertí en viciosa, tuve una completa adicción a eso que tanto llamaba mi atención. Fui obsesiva, no podía quitarme de la cabeza lo que tanto anhelaba. Fui tonta. Fui tanto...

Hoy no sé hasta donde hubiese sido capaz de llegar, o peor aún, no sé hasta donde pudiera llegar. Siento que haría todo por tenerlo cerca, por verlo allí a una distancia mínima, por tener la oportunidad de palpar y notar que es real.

Tal vez nunca vuelva a aquel lugar que me dio ilusiones, que me brindó una razón para existir. O puede ser que pronto esté nuevamente ahí, intentando cerrar el círculo, tratando de concluir lo que en algún momento inicié, buscando la posibilidad de aprobar mi asignatura pendiente.

Entretanto, prefiero quedarme en donde estoy ahora, en el cómodo sillón de las confesiones, donde puedo desahogarme, gritar, llorar, odiar y amar, sin que nadie me observe y nadie me reproche.

sábado, 12 de julio de 2008

La frase de la semana

"El amor es como un reloj de arena; mientras se llena el corazón, el cerebro se vacía"






No conseguí el autor de esta poderosa frase, pero que increíble es el realismo que expresa con sus letras

¿Solo?

Un extraordinario blog, de un joven a quien conocí hace poco, hablaba en una de sus entradas sobre un tema bastante interesante y "aterrador" (así lo definiría yo): la soledad.

¿Quién no se siente nervioso cuando está solo? ¿Quién es capaz de decir que la soledad es la mejor compañía? Si bien es cierto que hay momentos para estar con sí mismo, reflexionando y realizando una introspección, no es nada sencillo encontrar a alguien a quien no le importe estar todo el tiempo acompañado de su sombra.

¿En cuantas oportunidades no te has sentido solo aún cuando estás en un lugar abarrotado de gente?, tal vez muchas, tal vez nunca. Yo sí que he tenido episodios así. Imagínense esta escena: el centro comercial más recurrido de la ciudad un viernes en la tarde, un ipod, un helado y cientos de personas acompañadas caminando alrededor.

Jamás nos imaginamos que la soledad es tan desagradable hasta que la vivimos, hasta que sabemos lo que se siente no tener a nadie con quien hablar, con quien estar, con quien compartir Muchas veces uno desea estar sólo y cuando llega ese momento notamos lo horrible q es...

Puede ser que en este instante este pasando por un ataque de nostalgia, sólo espero que esta sensación no se apodere de mi por mucho tiempo.

jueves, 10 de julio de 2008

Agradecimiento público

Llevo más de 30 minutos buscando una frase, de esas que se quedan grabadas en la mente, que pueda expresar todo lo que siento y pienso en este momento.

Definitivamente hoy será un día difícil de olvidar, de esos que se quedan calados en la memoria tal vez para siempre. Cada palabra dicha es un aprendizaje inmenso que comenzará a formar parte del acervo de conocimientos que adquiero en cada encuentro, por corto que sea.

Es impresionante como 7 letras pueden llevar encima una carga tan grande. En muchas ocasiones la palabra "Gracias" la usamos por pura cortesía, cuando te dan paso, cuando te abren la puerta, cuando te dicen la hora..... pero es tan inusual que alguien la diga con el corazón, con el alma, sencillamente porque le nace, porque siente que es una de las palabras más hermosas del mundo.

Hace unos segundos leí lo siguiente:

Sólo un exceso es recomendable en el mundo: el exceso de gratitud

Vaya frase de Jean de la Bruyère, cuanto moralismo en sus letras.


Es tanto lo que te agradezco que siento que por primera vez incurrí en un exceso, un gran exceso.

Gracias por regalarme un poco de tus preciados minutos. Gracias por abrir una pequeña ventanita que me permita conocerte. Gracias por darme confianza. Gracias por hacerme hablar. Y por tantas otras cosas, también te digo gracias.

martes, 1 de julio de 2008

Frases sueltas

Te descubrí. Pensé, sólo por unos instantes, que mis letras estaban teniendo un poco de trascendencia, pero no. Eres tú. Quien está siempre ahí. Mi inspiración.

Sólo te ocultaste detrás de una fachada para observar mi reacción ante algún elemento nuevo, pero olvidaste un detalle. Te estudio y aunque no lo creas, observo con detenimiento cada palabra que dices, cada ademán, cada manía.

Sé que eres tu. Y tu sabes, en este momento, mientras lees, que no puedes jugar conmigo. Me divertí y me sigo divirtiendo con tus ideas locas e inteligentes. Sabes que de cierta forma me identifico contigo, hay empatía.

Entonces ríete. Continúa ahí, presente y ausente a la vez. Tu secreto está a salvo. Yo seguiré aquí, haciéndote creer que no sé nada y aprendiendo de ti aunque sea a distancia.

Volviendo a las letras

Cuanto tiempo sin escribir. Demasiado días sin desahogarme en las letras, sin contar nada (¡y vaya que tengo que contar!), sin siquiera revisar lo que otros publican.

Estaba totalmente perdida en un lugar que conozco completamente. Estaba ausente. Y ahora es que comienzo a recuperarme, a volver en sí, a pisar la tierra nuevamente gracias a una llamada que, sin duda alguna, me hizo despertar.

La finalidad de esta publicación es que sepan que sigo aquí, tal vez más desapercibida que nunca, pero presente. Y aunque sé que estas palabras llegan a una audiencia escaza, casi nula, debo respetar a mis 4 o 5 lectores.

Eventualmente volveré a publicar con regularidad, cuando el tiempo sea mi amigo y no se empeñe en ser "tacaño" conmigo; cuando tenga todo en orden y pueda contar cada cosa, cada experiencia e incluso, cada día con total precisión.

Por ahora, y sólo por ahora, me dedicaré a recordar los eventos importantísimos que han ocurrido en este período en el cual estuve desaparecida de este portal a mi vida. Porque aquí se muestra mucho más que en una página con mil fotos y con cientos de comentarios hechos por "amigos". En este lugar se reflejan las verdades aún cuando quien las publique se esconda en el anonimato.

Entonces si..., estoy de regreso, arreglé una que otra diferencia con el teclado de la computadora y ahora se entiende muy bien con mis dedos. Así que volverá la periodicidad, la literatura, el humor, las ironías de la vida y, porque no, tal vez hasta la cursilería, o el teatro, ya que muchas veces las situaciones son dignas de un guión merecedor de una excelente puesta en escena.